Los Mossos harán a partir de julio las funciones de policía ordinarias e integrales en todo el ámbito marítimo catalán

La primera fase del despliegue empieza el 1 de julio con tres nuevas bases en Vilanova i la Geltrú (Garraf), Palamós (Baix Empordà) y la Ametlla de Mar (Baix Ebre). «Empezamos a desplegar a los Mossos en el mar por donde acabó el despliegue del cuerpo de tierra», ha señalado el conseller de Interior Miquel Buch. «Somos conscientes de que es un pistoletazo de salida modesto pero cada día que pase ganaremos cuotas para acabar desplegando un cuerpo de policía marítima profesional y de calidad a lo largo de los 800 kilómetros de litoral que tenemos», ha destacado Buch.

Sus funciones son de vigilancia, patrullaje y control de las aguas marítimas para prevenir enla comisión de delitos e infracciones administrativas; la protección, auxilio, e información de los usuarios de las instalaciones portuarias y embarcaciones; la denuncia de infracciones administrativas de la reglamentación náutica comercial, pesquera y deportiva; la inspección y control de los entornos naturales; el salvamento marítimo y la colaboración con el resto de organismos, cuerpos policiales e instituciones que participan, en uso de sus competencias en el espacio marítimo.

«En el marco competencial que tenemos y espacios que podemos ocupar, actuaremos en plena actividad como policía administrativa y de seguridad ciudadana. En un ámbito marítimo que no es el nuestro, nos ponemos a disposición del cuerpo responsable para trabajar conjuntamente y ofrecer el servicio. Es como si se comete un delito justo un metro más allá de una delimitación territorial. En función de lo que nos vamos encontrando, lo iremos solucionando», ha explicado el conseller. Buch no ha querido adelantar si habrá que proponer el traslado de competencias que ahora tienen Guardia Civil o Policía Nacional en aguas marítimas interiores.

La Unidad Acuática

La Unidad Acuática de los Mossos se creó en 2008 y trabajan 17 agentes. Ahora se ha abierto un proceso de selección, donde se han presentado más de 400 aspirantes, y se escogerán 32 para las nuevas bases de la policía marítima de los Mossos. Una vez superadas las pruebas, los nuevos agentes marítimos recibirán formación específica en el Instituto de Seguridad Pública, con una duración de unas mil horas. También harán una parte práctica a la escuela de capacitación náutica-pesquera de la Ametlla de Mar y sobre salvamento marítimo en Asturias.

Las nuevas dependencias policiales se estrenarán en puertos de la Generalitat, donde «ha sido sencillo» disposición de las oficinas, instalaciones y amarres necesarios. El objetivo es desplegar por todo el litoral catalán hasta el 2022. «Normalizamos el despliegue del cuerpo marítimo de los Mossos para que podamos ejercer competencias con absoluta garantía», ha defendido el conseller de Interior.

Durante este año se licitará la compra de tres nuevas embarcaciones, mayores que la que tiene la unidad actualmente. Dispondrán de cabina con capacidad para diez personas, con unas dimensiones de once metros de eslora y una velocidad máxima no inferior a los 30 nudos. Estarán dotadas de material y equipamiento para el patrullaje marítimo.

Pero mientras estos recursos no lleguen, las nuevas patrullas, harán un proceso de adaptación al territorio, aproximándose a los entornos sociales de las zonas portuarias y marítimas, en los sectores pesquero, náutico, acuático, y las empresas y comercios vinculados con mi marítimo. «Diseñaremos con estos colectivos qué necesidades y qué esperan de esta policía», ha apuntado el comisario Joan Carles Molinero, jefe de la Comisaría general de Movilidad.