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Medio Ambiente

La cumbre climática de Cataluña llama empresas y organizaciones a comprometerse ante la emergencia

La reunión remarca la necesidad de actuar con urgencia y sitúa, entre los objetivos, la neutralidad de carbono y la transición energética

Plano general de una de las mesas de diálogo de la cumbre catalana por el clima en el TNC.

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La primera Cimera Catalana d'Acció Climàtica, que se ha celebrado este viernes en el Teatre Nacional de Catalunya (TNC), ha servido al Gobierno para lanzar a una batería de compromisos globales y sectoriales para que empresas, instituciones y otras organizaciones los asuman ante la situación de emergencia climática actual. Estos compromisos son voluntarios y las organizaciones interesadas se podrán adherir a través de un formulario. El Departamento de Territorio y Sostenibilidad, encargado de la iniciativa, seguirá el cumplimiento de estos compromisos y publicará la información de manera que todo el mundo pueda acceder.

Alcanzar la neutralidad del carbono en el 2050; impulsar la transición energética y reducir el impacto de la movilidad son algunos de los grandes retos que ha planteado la cumbre.

La cumbre del clima ha acabado con un centenar de compromisos voluntarios, entre globales y sectoriales, para que aquellas administraciones, empresas, instituciones y otras organizaciones que quieran se adhieran. La reunión, presidida por el presidente de la Generalitat, Quim Torra, y organizada por el Departamento de Territorio y Sostenibilidad, ha llenado la sala grande del Teatro Nacional de Catalunya (TNC), con un millar de personas representantes de organizaciones y asociaciones y de otros ámbitos de la sociedad civil.

Tuesta ha advertido que la naturaleza está enviando un 'SOS' y ha subrayado que una acción climática «cierta» y «transformadora» exigirá «sacrificios de todos; gobiernos, ayuntamientos, instituciones públicas, empresas y organizaciones económicas, sociales y profesionales».

La idea de la cumbre era hacer resonar esta necesidad de actuar de forma urgente ante la crisis climática. Uno de los mensajes que más se han escuchado durante la cumbre es la advertencia que el coste de no hacer nada ante la emergencia «será infinitamente mayor» que emprender acciones ahora, en palabras del director de la Representación de la Comisión Europea en Barcelona, Ferran Tarradellas.

En el exterior, movimientos por el clima y entidades ecologistas y sociales se han concentrado para protestar que no se los haya invitado cuando son los que más han hecho para situar la emergencia climática en la agenda pública y han reclamado políticas urgentes. En la intervención, sin hacer ninguna referencia a las quejas de los movimientos por el clima, Calvet ha dicho, en general, que en las próximas semanas interpelarán a más personas y más sectores por si alguien se pregunta «por qué no se le ha preguntado qué pensaba sobre los compromisos» que ha ofrecido la cumbre.

La iniciativa viene precedida por doce reuniones en que han participado representantes de cerca de 200 organizaciones y empresas con el objetivo de concretar ideas y objetivos de cara a este viernes. Las reuniones fueron en ámbitos como puertos y aeropuertos; industria y servicios; construcción y urbanismo y con sindicatos y patronales, entre otros.

Actuar y divulgar el compromiso climático

Los seis compromisos globales que propone la cumbre son alcanzar la neutralidad de carbono en el 2050; profundizar en el conocimiento del impacto climático de la actividad de la empresa u organización; divulgar y fomentar el compromiso climático; impulsar la transición energética, por ejemplo, con un plan|plano de eficiencia energética en iluminación y climatización o con un contrato energético de origen renovable; reducir el impacto climático de la movilidad -renovación de la flota, fomento del transporte público o vehículos compartidos entre los trabajadores, reuniones telemáticas que eviten desplazamientos, entre otros- y adoptar los principios de la economía circular.

Administraciones, centros de investigación y de salud

Con respecto a los compromisos sectoriales, el Gobierno plantea a las administraciones locales declarar la emergencia climática; incorporar aspectos climáticos en la planificación urbanística; regular la movilidad urbana para minimizar las emisiones y adecuar los presupuestos públicos a las prioridades de la emergencia climática, entre otros.

En los centros de formación superior e investigación, la cumbre los insta a convertir sus campus en un entorno activo en la sostenibilidad climática; garantizar la formación de profesionales en materia climática; renunciar a proyectos de investigación que puedan incrementar el impacto humano sobre el clima y aportar el conocimiento de la comunidad científica al servicio de la lucha ante la emergencia climática.

A las instituciones del campo de la salud, el Gobierno les pide desarrollar programas preventivos y paliativos de los efectos sobre la salud de las olas de calor y la eventual expansión de enfermedades tropicales, entre otros.

Movilidad y sector primario

En el sector de la movilidad, del transporte público y la logística, los compromisos voluntarios que la cumbre plantea son ofrecer a los usuarios la posibilidad de compensar las emisiones de su trayecto mientras la empresa no alcance la neutralidad de carbono y reducir las emisiones de su actividad.

En el sector primario, le pide impulsar medidas de adaptación de los cultivos al estrés hídrico y térmico causado por el calentamiento global y utilizar soluciones de fertilización de terrenos y de alimentación de ganado que tengan baja huella de carbono, entre otras propuestas de compromisos.

Empresas y organizaciones sociales y económicas

A las organizaciones sociales y económicas, el Gobierno propone compromisos como formar en economía circular y emergencia climática directivos y cuadras sindicales y ayudar en la transición climática justa los autónomos y pequeñas y medianas empresas.

A las empresas del sector del urbanismo, arquitectura y construcción, los lanzan los compromisos de informar a los clientes sobre las opciones de construir edificios e instalaciones con más eficiencia climática y optimizar el consumo de materiales de obra y su reciclaje.

A las empresas del sector ambiental y energético, se les plantea ofrecer a los clientes la compra en condiciones competitivas de electricidad de fuentes renovables y de biogás o eliminar todos los escapes de metano de sus instalaciones.

En el sector financiero, la cumbre le pide cumplir con los principios de banca responsable y de seguros sostenibles de las Naciones Unidas o potenciar tanto los fondos como las líneas de crédito vinculados a criterios climáticos para que acaben siendo los productos mayoritarios.

A las empresas del ámbito industrial y digital, les plantea rediseñar los circuitos internos para reducir el impacto climático o evitar contenidos en las campañas publicitarias que puedan inducir comportamientos perjudiciales al clima.

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