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Andalucía

Vox renuncia a la expulsión de los inmigrantes y derogar la Ley de violencia de género

Se ha acordado eliminar el impuesto de sucesiones, reducir el gasto de Canal Sur e impulsar un plan de apoyo a las familias

Santiago Abascal, lídier de Vox, en una imagen de archivo.

Santiago Abascal, lídier de Vox, en una imagen de archivo.EFE

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Vox ha renunciado a la derogación de la Ley de violencia de género, igualdad y de derechos LGTBI en el acuerdo alcanzado con el PP. Los dos partidos han rubricado un acuerdo que permitirá a Cs y PP un cambio histórico en el gobierno de Andalucía. En el pacto –que tiene 37 puntos- no aparece este punto, que era una de las exigencias que Vox puso sobre la mesa el martes a cambio de su apoyo al candidato Juanma Moreno. En el documento, sin embargo, sí aparece un acuerdo para promover una Ley de concordia que sustituya la ley de memoria histórica. Vox también había planteado la expulsión de 52.000 inmigrantes ilegales pero, finalmente, el partido de ultraderecha ha rebajado pretensiones y los dos partidos pactan trabajar por una inmigración «ordenada, legal, respetuosa con la cultura occidental y vinculada siempre al mercado laboral». También se eliminará el impuesto de sucesiones, se pacta reducir el gasto en medios públicos e impulsar un plan integral de soporte a las familias.

Después de tres reuniones maratonianas en 24 horas, PP y Vox han conseguido cerrar un acuerdo a través del cual los 12 diputados de la formación ultraderechista darán apoyo a un gobierno de Cs y PP en Andalucía, convirtiendo en el primer presidente popular a Juanma Moreno Bonilla.

Los secretarios generales de los dos partidos, Javier Ortega Smith (Vox) y Teodoro García (PP) acompañados de los líderes en Andalucía de las dos formaciones (Juanma Moreno Bonilla y Francisco Serrano) han rubricado el acuerdo, que cuenta con 37 puntos. Un acuerdo que se ha firmado al margen de Cs, que será el socio de gobierno del PP.

Vox rebaja sustancialmente sus pretensiones

En el listado, han desaparecido algunas de las propuestas más polémicas que Vox puso sobre la mesa el martes como condición para alcanzar un pacto en Andalucía. Entre ellas, derogar la Ley de violencia de género, igualdad y a favor de los derechos LGTBI, que fue la primera condición que impusieron los de ultraderecha para dar su apoyo al PP.

Un hecho que ha lamentado el secretario general de Vox, Javier Ortega Smith. «Nos hubiera gustado que se hubiera atendido esta petición pero seguiremos impulsando todas las medidas que no aparecen en el acuerdo por la vía parlamentaria», ha avanzado. Ortega también ha reconocido que han tenido que ceder y ha defendido que Vox ha negociado «con máxima responsabilidad» porque han entendido que existía «una oportunidad histórica» para un cambio político en Andalucía y había que hacer «lo máximo esfuerzo». «Ha habido cesiones por los dos lados», ha añadido.

En el documento tampoco aparecen medidas drásticas en inmigración, como la expulsión de 52.000 inmigrantes ilegales o la obligación de los médicos de denunciar a los enfermos que fueran a centro médicos y no tuvieran papeles. Vox también renuncia a cambiar la festividad autonómica de Andalucía del 28 de febrero al 2 de enero para conmemorar la reconquista.

Para contar, y en materia de inmigración, el acuerdo recoge el compromiso de cumplir la legislación vigente, evitando todas las decisiones que favorezcan un «efecto grita» y combatir también a las mafias que trafican en personas. Además, recogen la voluntad de trabajar por una inmigración «ordenada, legal, respetuosa con la cultura occidental y vinculada siempre al mercado laboral». También poner todos los recursos de la Junta de Andalucía para «combatir el fundamentalismo islámico». Todo, sin concretar ninguna medida.

Una de las peticiones de Vox también era la de derogar la Ley andaluza de memoria histórica, que será sustituida por una ley «de concordia».

La formación de ultraderecha también pedía que un discurso oficial del presidente de la Junta de Andalucía condenando los ataques a Vox. En el acuerdo, sin embargo, se rebaja este punto y se menciona que se abogará por un gobierno «basado en el diálogo y el respeto a todas las fuerzas constitucionalistas, condenando todo ataque a cualquier fuerza política».

Beneficios para las familias

Por otra parte, destaca todo un paquete de medidas pensadas para las familias. En el acuerdo se menciona un plan integral para las familias con acciones para fomentar la natalidad con medidas como ampliar de 0 a 3 años la gratuidad de la educación, implantar una red de jardines de infancia y beneficios fiscales para las familias, especialmente las numerosas. Asimismo, se impulsará la creación de una Consejería de Familia.

También se comprometen a poner en marcha un sistema de atención a las mujeres con embarazos no deseados y desarrollar un plan andaluz de adopción. En materia de sanidad, entre otros, se conjuran por luchar contra el llamado «turismo sanitario». Y también acuerdan integrar las embajadas comerciales de Andalucía existentes en el extranjero con la red estatal.

Otra demanda de Vox era cerrar la radio y la televisión pública andaluza. En cambio, el acuerdo con el PP apuesta por «reducir el gasto, mejorar la eficiencia y racionalizar los recursos».

Por otra parte, y en materia económica, se acuerda bonificar el 99% del impuesto de sucesiones y donaciones y reducir el tramo autonómico del IRPF y el impuesto del patrimonio. También aparece un acuerdo para «eliminar todos los organismos superfluos y suprimir la administración paralela», en referencia a los bautizados como «chiringuitos socialistas».

También se ponen de acuerdo para apoyar por ley la tauromaquia y promover expresiones culturales y populares como el flamenco y la Semana Santa así como dar apoyo a la caza.

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