El homicida de Castellón quería asesinar a su expareja y fue a por su familia

El acusado de matar a un hombre de 70 años en Castellón y agredir sexualmente a una chica de 22 años, quiso hacer daño a la familia de su expareja, hijastra del fallecido y madre de la chica, antes de asesinarla y después de que ella lo denunciara y se refugiara desde el lunes en un centro de acogida.

Estas son las primeras conclusiones de la investigación del caso ocurrido este martes en una vivienda de Castellón por el cual el principal sospechoso, un hombre de 46 años, permanece custodiado policialmente en el Hospital General de Castellón, inconsciente a causa de las heridas en el abdomen y tórax que sufrió después de caer a una acequia cuando huía del lugar de los hechos.

La chica, a quien el sospechoso obligó a desnudarse a punta de cuchillo y el abuelo de la cual -«un héroe», según el delegado del Gobierno, Juan Carlos Moragues- salvó de ser agredida al enfrentarse con él antes de recibir las cuchilladas que causaron su muerte, también sigue ingresada pero sus heridas son de menos gravedad.

Según el Tribunal Superior de Justicia valenciano, el homicida había sido juzgado y condenado el 14 de febrero en Castellón por un delito de amenazas, en el ámbito de la violencia de género, a 60 días de trabajos en beneficio de la comunidad y se le prohibió acercarse a su expareja durante un año.

El acusado amenazó a la víctima en presencia de los policías locales que habían acudido al domicilio después de recibir una llamada del 112 que alertaba de una fuerte discusión de pareja.

La sentencia fue fruto de un acuerdo entre la defensa y el fiscal y el acusado que se declaró culpable, mientras que la víctima, según la sentencia del Juzgado de lo Penal número 3, se negó a interponer denuncia por los hechos y en su comparecencia ante el juez se acogió a no declarar.

La alcaldesa de Castellón, Amparo Marco, ha afirmado en referencia al sospechoso que este acudió este martes al domicilio del muerto «e intentó esposar a los abuelos y a la hija para esperar a su expareja y asesinarla».

Marco ha explicado que era su expareja, que se encontraba en un centro de protección de víctimas de violencia de género en el momento del suceso, a la cual iban dirigidas las agresiones en el domicilio de sus padres, no se sabe si la hija era otro objetivo. El delegado del Gobierno ha asegurado que este hombre es una persona «muy conflictiva» y con numerosos antecedentes policiales.

La Policía recomendó a la denunciante que se refugiara en un centro de acogida y sometió su domicilio a vigilancia, pero el sospechoso, en lugar de ir, se dirigió al de los padres de la mujer, en el cual también había la hija de la denunciante.

El Ayuntamiento de Castellón ha celebrado al mediodía una concentración silenciosa de repulsa, a la cual han asistido numerosos cargos institucionales autonómicos, provinciales y locales.