Càritas Diocesana instala nuevos contenedores de recogida de ropa usada en Tortosa

Càritas Diocesana de Tortosa ha instalado nuevos contenedores de recogida de ropa usada en Tortosa. En concreto tiene instalados ocho en la ciudad y llega casi a una veintena contante los otros municipios del territorio. Desde el mes de septiembre se han recogido ocho toneladas de ropa sólo a la capital ebrense. De esta, se abastecerá el ropero de Càritas en la ciudad y los excedentes se trasladarán a la planta de tratamiento textil de Roba Amiga, a Sant Esteve Sesrovires donde se hace la selección de la ropa que se puede distribuir, la que se envía a otros países y la que se recicla para hacer materia prima. El proyecto mujer trabajo a dieciséis personas con dificultades de inserción laboral en el Ebro y Tarragona y en la planta de selección también trabajan más de 150 empleados.

La ampliación del número de contenedores de ropa usada instalados en Tortosa responde al nuevo convenio firmado entre Càritas Diocesana y la Fundación Formación y Trabajo que gestiona diferentes plantas de selección textil en Barcelona y Tarragona. De esta manera cómo ha apuntado el alcalde de Tortosa, Ferran Bel, el proyecto servicio para abastecer de ropa a los ciudadanos con necesidades y también para impulsar la inserción laboral.

Los excedentes de ropa que no necesite Càritas de Tortosa se enviarán a la planta textil que la fundación tiene a Sant Esteve Sesrovires y donde se ofrecen casi 170 puestos de trabajo –durante el 2016 Formación y Trabajo hizo 260 contratos. «Tenemos que saber que hacemos posible que personas que tendrían dificultades en insertarse laboralmente, lo pueden hacer y contribuimos. Tan de bono se tenga que hacer ampliación y recogemos muchos kilos de ropa», ha apuntado a Bel.

Como ha apuntado Agustí Adell, secretario general de Càritas de Tortosa, se ayuda a las personas a salir de situaciones de vulnerabilidad y también al medio ambiente- «Ayudamos a la gente a vehicular la ropa que es un residuo, para reaprovecharla y reciclarla», ha explicado. De hecho, como ha detallado y Marina Arnau, directora de la Fundación Formación y Trabajo en el Ebro y Tarragona, casi el 50% de la ropa que les llega a la planta textil se exporta a países «con menos industria textil desarrollada», un 35% se recicla para volver a hacer materia prima, un 7-8% no se puede utilizar y el resto se recupera para las tiendas de Ropa Amiga y los roperos de Càritas.

En los contenedores se puede llevar todo tipos de ropa, calzado y complementos y también algunas prendas de ropa de al hogar. Aunque se hace una revisión semanal del estado, en el exterior de los contenedores se ha inscrito el número de teléfono donde la ciudadanía puede avisar si se encuentra lleno o si sufre algún acto vandálico.