Diari Més

Alumnos de la Escola Oficial d'Idiomes denuncian la mala praxis de una maestra

El grupo pide que el departamento les devuelva el dinero de la matrícula del curso intensivo

Entrada de la Escola Oficial d'Idiomes, situada en el antiguo edificio de la fábrica de la Chartreuse.

Alumnos de la Escuela Oficial de Idiomas denuncian la mala praxis de una maestraCristina Aguilar

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Los alumnos de la Escola Oficial d'Idiomes que estudian el curso intensivo de inglés, –que empezó en septiembre y acaba este enero–, denuncian el método que utiliza una profesora para enseñar. «Sentimos que estamos perdiendo el tiempo. La maestra no se prepara las clases, pierde información y pasa por alto algunos temarios», explica Abraham Veciana, el delegado de la clase. Es por eso que los nueve alumnos del curso piden en el departamento de Enseñanza que les devuelva el dinero que ha pagado. «Nos sentimos estafados y engañados. La situación es injusta y nos encontramos indefensos porque nadie nos hace caso», lamenta Veciana.

Sin ir más lejos, este martes, el grupo tenía previsto un examen que finalmente no se hizo, porque la profesora está de baja desde el lunes. «Nadie nos ha dicho nada y tampoco ha venido ningún profesor sustituto», explica el delegado de la clase, que añade que «hemos pedido un aula para poder hablar y decidir qué acciones tenemos que hacer en un futuro: esta situación es insoportable». El curso acaba este enero y los alumnos aseguran que no han aprendido nada.

Antes de las fiestas de Navidad, la clase fue a quejarse a la dirección del centro. Según la directora de la EOI, Yolanda Scott, «hemos activado el protocolo adecuado en estas situaciones. Se trata de contrastar la información que nos ha dado el grupo de clase. Pero la profesora en cuestión ha cogido la baja y todavía no hemos podido poner en marcha la maquinaria». Aun así, Scott asegura que «no hay datos objetivos» que den apoyo a la idea de apartar a la maestra de las clases. Por otra parte, los alumnos aseguran que se han puesto en contacto con el inspector de educación de Tarragona y le han trasladado su malestar.

«El problema es que la maestra es funcionaria y tiene la plaza fija. Por eso no pueden prescindir de ella», asegura Veciana, quien añade que «nos consta que la dirección del centro ha recibido más quejas durante los años anteriores porque exalumnos nos han explicado situaciones similares con la misma docente». Según el delegado, el curso empezó con trece alumnos, que han ido abandonando la formación, porque «perdían el tiempo». La clase asegura que nunca hacen prácticas orales ni redacciones, y «estamos convencidos de lo que denunciamos porque nos consta que los cursos intensivos de otras lenguas son diferentes». El grupo no descarta llevar a cabo una concentración para «reivindicar nuestros derechos».

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