«Les han estafado 230 euros alertando de un escape de gas falso en su casa»

Un matrimonio de ancianos de 79 y 83 años del barrio de Bonavista resultó estafado el último lunes día 19 por dos hombres y una mujer de nacionalidad española de mediana edad, que se hicieron pasar por personal técnico de la compañía Gas Natural. Una chica los llamó por teléfono, con número privado, alertando de que había un escape en la casa y que tenían que venir rápido unos técnicos. Mi abuelo, en un primer momento, les dijo que no, porque estaban comiendo, pero les acabaron asustando y aceptaron que vinieran», apunta a la nieta de los estafados a Diari Més. Al cabo de pocos minutos, se presentó un hombre en el piso y pidió que lo condujeran a la estancia donde está la instalación del gas. «Los acabó convenciendo de qué olía mucho a gas», explica la chica. Acto seguido, el falso operario avisó a un supuesto compañero por teléfono, para que le llevara la pieza que había que reponer. En cuestión de 15 minutos, llamó a la puerta del bloque de la calle donde reside el matrimonio y el farsante de dentro abrió.

«En aquel momento podían haber entrado perfectamente tres o cuatro hombres más y hacer lo que quisieran con mis abuelos. Si le llegan a dar un golpe a mi abuelo, se habría quedado en el lugar, y mi abuela no puede hacer nada porque casi no puede andar, sólo va de la silla de ruedas a la cama», expone la familiar. Entonces, no fueron conscientes del peligro que suponía dejar entrar a aquellos desconocidos que vestían un mono azul de operarios, pero a posteriori, cuando se dieron cuenta de los hechos, quedaron estremecidos. «Se asustaron mucho pensando que les podía haber pasado cualquier cosa al dejarlos pasar. Creo que es más el miedo de lo que les podían haber hecho, que no por el dinero que se les robó», apunta a la nieta, que prefiere no identificarse.

Factura falsa pero con IVA

Hay dos aspectos que han sorprendido especialmente a la familia: «Cuando les dieron la factura, que se nota que está sacada de un blog de facturas de cualquier tienda china, les pusieron el precio de la supuesta reparación, que eran 220 euros y, aparte, ¡escribieron que les cobraban 10 euros de IVA! En total eran 230 euros. La otra cosa curiosa es que mi abuelo, se ve que les llevó 250 euros porque no lo tenía justo, y ellos le devolvieron el cambio», explica sorprendida, todavía ahora, la joven. Según confirma, los falsos técnicos no se llevaron nada de valor de la casa. Su intención era pasar desapercibidos y actuar con normalidad hasta haber cobrado. Y es que, una vez tuvieron el dinero en la mano, les faltó tiempo para huir, dejándolo todo empantanado: habían desmontado la válvula de seguridad del gas –por donde se abre y se cierra– para fingir la reparación, y no fueron capaces de volver a encajarla. Eso hizo que, unas horas más tarde, cuando el matrimonio se disponía a utilizar los fogones, se dieran cuenta de que les habían estafado: «Los técnicos habían cerrado la válvula, y sin la pieza no conseguían volver a abrir el gas», recuerda a la nieta.

Lo que no se explica ella es, como supieron los delincuentes el nombre de su abuela, a la cual se dirigían con nombre y apellidos. «En la guía telefónica está ella, pero la cuenta del gas va a nombre de él. No consigo entender cómo sabían que eran dos personas mayores y dónde vivían... Quizás los estuvieron vigilando antes de hacerlo», reflexiona la joven, que sigue preguntándose cómo ha podido llegar a pasar, «siempre se los hemos dicho que no abran a nadie y que, si hay alguna cosa, que nos llamen. De hecho, ya se los habíamos dicho alguna vez que no dieran dinero a nadie, que hoy día todo lo pasan por el banco».