Diari Més

La Generalitat llevará a ADIF a los juzgados para que «cumpla de una vez los compromisos»

El conseller ha explicado este miércoles en Tarragona que no pueden abrir expedientes a Renfe, ya que «la mayoría de incidencias no le son imputables»

El conseller de Territorio y Sostenibilidad, Josep Rull, hojeando el Libro de Honor del Ayuntamiento de Tarragona, bajo la mirada del alcalde, Josep Fèlix Ballesteros.

La Generalitat llevará a ADIF a los juzgados para que «cumpla de una vez los compromisos»ACN

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La Generalitat de Catalunya llevará a ADIF,la gestora de las infraestructuras ferroviarias, alos juzgados. Es lo que ha anunciado esta tarde el conseller de Territorio y Sostenibilidad, Josep Rull, durante su primera visita oficial a Tarragona. «Se trata de un frente común exigiendo que se cumplan los compromisos. Aquello que tienen que hacer, lo saben perfectamente, está escrito y pactado, y se incumple. La responsabilidad es muy clara. En esta línea desde la Generalitat tenemos la voluntad de presentar un contencioso administrativo en contra de ADIF para que cumpla de una vez por todas los compromisos. Sin inversión y sin una buena gestión, no se pueden cumplir», ha expuesto al conseller. Antes de presentar el contencioso administrativo, la Generalitat envió un requerimiento previo a ADIF, el organismo público lo respondió y en estos momentos los técnicos de la Generalitat lo están estudiando, de cara a poder rebatirlo a los juzgados. «Lo acabamos de preparar, también con el mundo local. Tenemos que ver en qué términos se plantea, pero será este mismo mes de septiembre o la primera semana de octubre», apuntó el conseller de Territori.

La demanda no afectará a Renfe Operadora, ya que según Rull, «la mayoría de las incidencias no son imputables a Renfe. Los 360 millones de euros que prometió Fomento eran básicamente para la infraestructura, no sobre el material móvil». Y es que Renfe pone los trenes y se encarga de la atención al usuario, y ADIF es la responsable de la infraestructura. «No podemos abrir expedientes que no tendrán viabilidad», ha desarrollado elconseller, en referencia a Renfe. Con todo, la conselleria de Territori tampoco está muy satisfecha con la gestión de las incidencias por parte del operador, «es muy mejorable su servicio, pero va haciendo las cosas razonablemente, aunque falta información al usuario», apuntaba. Con todo, según Rull, ni que buscáramos uno de los mejores operadores del mundo, con estas condiciones infraestructuras tampoco podríamos garantizar el servicio».

Apoyo del mundo local

Rull busca el apoyo de los consistorios de Cataluña en esta batalla contra el gestor ferroviario estatal, y por descontado, esta tarde ha recibido el apoyo del alcalde tarraconense, Josep Fèlix Ballesteros. «Sumarnos al contencioso no sé si es posible, pero política e institucionalmente los aseguro que sí. Se suma el alcalde, el Ayuntamiento, la ciudad y creo que la mayoría de los ciudadanos del territorio», ha explicado el primer edil.

«Queremos agradecer el compromiso del Ayuntamiento, al servicio de la gente. En aquello que afecta a las Rodalies tenemos un diagnóstico compartido», ha comentado el conseller. «Este no es un problema que afecte a la Generalitat de Catalunya, ni en el Ayuntamiento de Tarragona, ni al territorio, es un problema de la gente, de los ciudadanos, que son los que lo sufren. Es un problema de país», ha añadido. Se trata de unir fuerzas para hacer un frente común contra el gobierno del Estado, responsable de ADIF.

Fin de las obras en Mont-roig

El conseller también ha anunciado esta tarde que Renfe les ha comunicado que las obras del enclave de Mont-roig del Camp podrían darse por finalizadas esta próxima semana, un gran avance, teniendo en cuenta que ADIF no contaba tenerlas terminadas hasta octubre. Eso repercutirá de forma notable en el tiempo de trayecto de los viajeros de la R-16, en la parte sur de su recorrido.

Con respecto al maquillaje de los horarios que la Generalitat firmó con Renfe este verano, en la R-16, de cara a disminuir los retrasos, el conseller ha admitido que no estaban nada satisfechos, y que esta medida no se extenderá a otras líneas de cercanías de Cataluña, «el objetivo no era tener una puntualidad del 65%, era llegar al 90%. Nosotros lo que no podemos hacer es dar apoyo a un mecanismo que acabe perpetuando el problema».

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