Diari Més

La mujer acusada de secuestrar a su hija: «Me miran por la calle»

Natalia Alberti recurrirá todas las sentencias para recuperar la custodia de la pequeña de 5 años

Natalia Alberti prefiere no mostrar su rostro.

La mujer acusada de secuestrar a su hija: «Me miran por la calle»Carla Pomerol

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«Me da miedo salir en la calle. Todo el mundo me mira y me reconoce», explica Natalia Alberti, la mujer de 40 años, acusada por su exmarido de secuestrar a su hija. A principios de mayo, Màrius Lleget, vecino de Tarragona, denunció públicamente a su expareja por haber desaparecido y por haberse llevado a la hija de ambos, una niña de 5 años. El hombre, desesperado, colgó carteles por Vilafranca del Penedès —localidad donde reside la madre y la niña—, y explicó su historia a los medios de comunicación. Algunosperiódicospublicaron la foto de Natalia. «Es por eso que, vaya donde vaya, la gente me reconoce», comenta Natalia.

Según explica la mujer, «me marché unos días de vacaciones a Olot con mi hija, y Màrius me ha denunciado por secuestro». Hace aproximadamente un mes, la justicia dio la custodia de la pequeña al padre. Pero Natalia y sus abogadas aseguran que recurrirán las sentencias hasta conseguir demostrar que lo mejor parala niña es vivir con la madre.

Durante diez días, Natalia y su hija estuvieron en Olot. Según explica la mujer, «Màrius tenía constancia de esta escapada, y aunque me extrañó, estaba de acuerdo». Según explica Natalia, se quedó sin batería en el móvil y no pudo avisar a Màrius hasta que llegaron a Olot. «Allí no teníamos cobertura, pero tampoco necesitaba hablar con nadie», explica Natalia. Cuando supo que los Mossosd'Esquadra lo estaban buscando, volvió hacia Vilafranca del Penedès y se personó en la Comisaría. La semana que viene, Natalia tiene que declarar como acusada porel secuestro de su hija

«Sólo quiero vivir tranquila»

«No es la primera vez que Màrius organiza un circo como este», explica Natalia. «En una ocasión, llevóa la niña a urgencias y la obligó a decir a los médicos que yo la maltrataba», comenta. Según explican las abogadas y la madre, «cuando la pequeña vuelve de pasar unos días con su padre está nerviosa y angustiada».

ParaNatalia, su pesadilla empezó cuando se quedó embarazada de su hija, ahora hace cinco años. «Màrius perdió la visión y el infierno llegó a casa. Lo denuncié por maltrato y salió absuelto. A partir de aquí él se ha visto capacitado para hundirme la vida. Yo sólo quiero vivir tranquila con mi hija. No me imaginaba que llegáramos hasta aquí», explica desesperada Natalia.

Tutela judicial no efectiva ParaNatalia, que la justicia haya dado la custodia de la niña al padre ha sido una sorpresa. «Un informe hecho por profesionales del ámbito dice que la niña estaba bien viviendo conmigo, explica». El día del juicio, según afirma Natalia «la jueza me dijo que, o aceptaba la custodia compartida, o le daría la custodia individual al padre». Las abogadas de la mujer creen que la jueza ya tenía pensadoloqueharía, antes de celebrar la vista. «No actuó con imparcialidad», comentan las abogadas. Natalia no tiene recursos económicos, y cada vez que su exmarido la denuncia, le otorgan un abogado de oficio diferente. Hasta ahora, la mujer no ha tenido mucha suerte, y según ella «no me han defendido bien». Es por esto, que actualmente, sus tres abogadas se han puesto de acuerdo, y aseguran que lucharán «por recuperar la dignidad de Natalia».

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