La primera fase de las obras de urbanización de Mas Mainer encara el tramo final

La primera fase de la ejecución del proyecto de urbanización de Mas Mainer, que abraza la construcción de la nueva rotonda en el cruce entre la avenida del Onze de Setembre y la calle de General Moragues, la creación de la acera y la adaptación del entorno del futuro Mercadona, se encuentra muy adelantada. La Junta de Gobierno tratará, este viernes y como el sexto punto del orden del día, la recepción parcial de estas obras, un trámite donde no se incluirá ahora la parte correspondiente a la superficie comercial –donde se está trabajando– ni tampoco el resto de fases previstas y todavía no completadas, tal como precisan fuentes municipales.

El global del plan de Mas Mainer se desarrolla sobre más de 18.000 metros de suelo urbano, en una finca que limita con la vía del tren, la escuela Joan Rebull, la avenida del Onze de Setembre y la avenida General Moragues. Las obras arrancaron con el objetivo de mejorar de la movilidad por las avenidas, así como la ampliación de los espacios verdes de uso público. Igualmente, se concentra la futura actividad comercial en una parcela independiente. El plan prevé también el uso residencial, que se construirá de manera en un futuro, de acuerdo al crecimiento de la demanda, tal como informaron a su momento desde el Ayuntamiento.

Una zona verde mayor

Fuentes municipales detallan que, en las siguientes fases de ejecución del proyecto de Mas Mainer, y sobre el ajardinamiento de la zona verde que ahora se está ejecutando, está la previsión de plantar más plantas de las que estaban inicialmente previstas.

A finales de julio, el proyecto dejó de contemplar el carril bici que tenía que transcurrir inicialmente por el interior de la acera, en la avenida Onze de Setembre, y recuperó un espacio para el estacionamiento de vehículos. La modificación respondía, según detallaban fuentes municipales, a las conclusiones de un informe encargado a una consultora experta que recomendó sacar el carril, tanto de la acera –la cual estrenará igualmente una docena de puntos de luz– como de la calzada, para una cuestión de seguridad. Mantener el itinerario no resultaba pertinente, concretaban las mismas fuentes, «dada la proximidad de la Escola Joan Rebull y por tratarse al mismo tiempo de uno de los viales con más densidad de tráfico de la ciudad».

El cambio, aprobado también en Junta de Gobierno en verano, sigue las directrices de diferentes departamentos municipales y estaba fundamentado en tres puntos: retirar el bordillo dos metros hacia el interior, reduciendo el espacio de acera y dejando así una calzada de ocho metros; eliminar el carril bici en acera y eliminar el paso de peatones de la avenida que estaba previsto a la altura de la calle Doctor Domènech.

La construcción de la rotonda, a su vez, se inició en abril, y esta entró en funcionamiento de manera provisional también a finales de julio. La remodelación del ámbito dará lugar también en una gran zona verde para uso público y a un espacio adicional que irá a manos de la Escuela Joan Rebull, pendiente todavía de perfilar el uso. Y a nuevos equipamientos comerciales. Es el caso del Mercadona que la cadena abrirá el último cuatrimestre de este 2017 y donde trasladará la plantilla del supermercado que la marca tiene en la calle General Moragues. Este cesará la actividad con la puesta en marcha del nuevo centro para «ofrecer más comodidad a los clientes y adaptarse a los estándares de calidad».