La recuperación de Abraham cierra el debate en la banda izquierda del Nàstic

Del empate del Gimnàstic de Tarragona en La Romareda se pueden extraer muchas conclusiones. Algunas positivas y, otras, no tanto. El empate se puede considerar bono dependiendo de cómo se mire. Si uno mismo recuerda que el Nàstic estaba desfigurado, no tenía alma y no sabía a qué jugaba a principios de temporada, el punto es bueno. Si lo que se tiene en consideración es que el Real Zaragoza se quedó con diez futbolistas a la primera mitad, quizás queda un poco corto el empate para los más exigentes. Pero los partidos dan para mucho y, este, en el dibujo táctico, dejó cosas muy interesantes.

Una de las que más gustó fue ver, desde el inicio del partido, a Javi Jiménez y a Abraham Minero juntos en la misma banda. El primero, como lateral y, su compañero, haciendo de extremo. Era una posibilidad que, con los días, había ido cogiendo cuerpo, y que se convirtió una realidad, obligada por las circunstancias.

Abraham había llegado al Nàstic para ser el lateral izquierdo titular del equipo. Javi Jiménez, en principio, tenía que esperar su oportunidad desde el banquillo, pero la lesión del exjugador del Levante motivó un cambio de planes. Fue Jiménez el que empezó en la titularidad, y sus impresionantes actuaciones hacían imposible que alguien se llegara a plantear la posibilidad de dejarle en el banquillo. Pero Abraham ya se había recuperado, y había que buscar una solución para que uno de los futbolistas con más calidad de la plantilla pudiera encontrar su sitio. La solución era fácil y sencilla, y Rodri se ha limitado a aplicarla (no quiere decir que no tenga mérito, ya que ha tenido que tomar la decisión).

Primero, estuvo con los 27 minutos que le dio en el duelo domingo pasado contra el Albacete. Fue como extremo, y las sensaciones no fueron del todo negativas. Después, con la titularidad de este domingo en La Romareda. El futbolista de Granollers se complementó a la perfección con Javi Jiménez, dejando que el lateral lo doblara tantas veces como quisiera, ya que, en caso de emergencia, el mismo Abraham podía coger el lateral.

En más, la peligrosidad que ofrecía Alberto Benito en el carril derecho del Real Zaragoza motivaba que los hombres de lado izquierda del Nàstic no necesitaban ser extremos puros demasiado alegres. También se lesionó el lateral de Altafulla, y esta circunstancia motivó que la banda izquierda del Nàstic jugara sin la presión de estar siempre atenta al mismo Benito.

Entrenó bien

No pudo soportar los 90 minutos Minero y se tuvo que retirar del terreno de juego con molestias. En el minuto 74 de partido, Juan Muñiz le dio el relevo, en el que fue el último cambio del enfrentamiento por parte del Nàstic. Abrahán se quedó en el césped, recibiendo asistencia médica, pero nada de gravedad. De hecho, ayer entrenó con total normalidad con el resto de la plantilla. El equipo hoy disfrutará de jornada festiva y mañana devolverá en el trabajo en doble sesión, situación habitual con Rodri después de los días de descanso.