La procesión de la Virgen marca la recta final de Les Nits Daurades

La capital de la Costa Daurada, Salou, exhibía tradición ayer martes 15 de agosto, en el marco de sus fiestas mayores más turísticas: las Nits Daurades. La procesión de la Virgen daba protagonismo a los pescadores, uno de los colectivos más arraigados y menos conocidos por los turistas, el cual mostraba la imagen en un recorrido que transitaba por tierra y mar y que marcaba el principio del fin de las fiestas mayores de verano salouenses.

«Ha habido una altísima afluencia de público. Todos los actos han disfrutado de muchos visitantes». Este es el balance que hacía el alcalde de Salou, Pere Granados, de las Nits Daurades.

Miles de personas iban ayer a la ciudad ya por la tarde y miraban de encontrar sitio, tanto para aparcar como para, después, estar presentes en el espectáculo final, en uno de los días en que Salou tiene una de sus puntas de afluencia de turistas y de poblaciones vecinas. Y es que, el gran castillo de fuegos artificiales, que cada año marca el punto final de la fiesta, creaba expectación y una afluencia masiva de personas a las playas, el mejor lugar para verlos.

«Hemos hecho una gran exhibición de cultura popular, pero también nos hemos situado en el calendario internacional de música, con conciertos como los de Luis Fonsi o Rosario, y los que faltan por hacer», añade Granados.

De hecho, aunque el concurso de fuegos marcaba ayer el final de fiestas, el cierto es que dos de los grandes conciertos del programa se ofrecen hoy miércoles y el sábado. Hoy, a partir de las diez de la noche y en el escenario de la plaza de las Comunidades Autónomas actuará India Martínez. El sábado, 19 de agosto, en la misma hora y lugar, actuará Vanesa Martín.

Este año, los grandes conciertos de pago cambiaban de lugar, del campo de fútbol en pleno centro del paseo Jaume I, en primera línea de mar. Este cambio, ha sido, según Granados, muy satisfactorio. «Siempre habido conciertos de pago a las Nits Daurades y, este año, se han hecho en el paseo marítimo. La gente ha podido escuchar a los artistas en el escenario, pero también desde fuera. Muchos visitantes han venido al concierto y, después se han quedado y han dado mucha vida en los chiringuitos de playa y a los negocios del paseo Jaume I», finalizaba el alcalde de Salou, Pere Granados.