Marta Pascal sale del Supremo sin medidas cautelares después de declarar ante el juez Llarena

La coordinadora general del PDeCAT, Marta Pascal, ha salido en libertad y sin medidas cautelares del Tribunal Supremo después de declarar durante menos de una hora ante el juez Llarena, que instruye la causa contra los líderes independentista. Según fuentes jurídicas, durante su declaración, Pascal ha insistido en que la declaración de independencia del 27-O tenía carácter «político» pero no jurídico, y ha recordado que en las reuniones que ha mantenido con el presidente destituido de la Generalitat, Carles Puigdemont, le ha transmitido que era conveniente formar gobierno el más bien posible. Pascal, que ha contestado las preguntas de todas las partes (el juez Llarena no le ha hecho cabeza), no ha coincidido con alguna de las partes que apuntaban que los hechos del 20 y 21 de septiembre tuvieron carácter violento, y ha añadido que a ella la violencia le genera «disgusto». Ni la Fiscalía, ni el Abogado del Estado ni la acusación popular de Vox ha pedido ninguna medida cautelar para ella.

Pascal ha afirmado delante el Supremo que no conoce el contenido del documento Enfocados en que se basa buena parte de la causa del juez Llarena y que tampoco tiene conocimiento de lo que pudiera contener la agenda del exnúmero dos de Oriol Junqueras, Josep Maria Jové.

Ha apuntado que en sus desplazamientos a|en Bruselas ha abordado con Puigdemont su situación personal, y le ha transmitido la necesidad de confirmar un gobierno tan soltar como sea posible, en la línea de lo que declaró en una entrevista en La Vanguardia la semana pasada.

La coordinadora general del PDeCAT ha respondido todas las preguntas que le han formulado las partes, todo y que el juez Llarena –que es quien la había citado- no ha hecho ninguna. Según fuentes de la defensa, las preguntas de la Fiscalía han sido genéricas y su declaración no ha aportado novedades.

Al finalizar la declaración ninguna de las partes ha pedido tampoco medidas cautelares, contrariamente a lo que ha pasado con Marta Rovira, que ha quedado con libertad pero tendrá que depositar una fianza de 60.000 euros.